El Archivo Municipal ha presentado hoy varios recursos y documentos muy significativos para la historia de Toledo y que son “el resultado de un trabajo de mucha gente”, tal y como ha destacado la concejal de Cultura, Ana Pérez.
Se trata de cinco documentos restaurados por el Instituto del Patrimonio Cultural de España durante un proceso que ha durado seis años y que hoy ven la luz. La concejal de Cultura, Ana Pérez, ha agradecido la labor del archivero municipal, Mariano García Ruipérez y de todo su equipo en un trabajo excelente para difundir estos documentos del Archivo Secreto. “Todos los archivos tienen la función de reunir, proteger y sobre todo difundir, todos los documentos de los que son depositarios, que nos ayudan a conocer nuestra historia y nuestro patrimonio”, ha afirmado la titular de Cultura.
El primero de ellos son las Constituciones de la Cofradía- Hermandad de San Pedro de Toledo, del año 1312; un pergamino de 76x 56 cm. También se han restaurado dos Cuadernos originales de las Cortes de Castilla celebradas en Segovia en 1347 y en Toro en 1371, ambos conservados en el Archivo Secreto. Además, el Archivo Municipal recupera la carta de arrendamiento que hizo Toledo de las rentas de sus propios y montes del partido de Alcocer y Fuenlabrada del año 1429; y el pleito seguido ante la justicia de Toledo entre Diego Rodríguez de Madrid, arrendador de las rentas de Toledo en el partido de Herrera, y Pedro López de Herrera sobre haber entrado ganado en la dehesa de Acijara del año 1431.
Por último, también se han presentado cinco pergaminos del Archivo Secreto, que datan de 1341 y que acreditan que el Ayuntamiento de Toledo compró los terrenos de Vega Baja; y dos libros de actas de los acuerdos del Ayuntamiento de 1556 y 1557 restaurados en el taller laboratorio de restauración de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli.
Lo más llamativo, según el archivero municipal, es cómo han instalado los documentos, de tal manera que se puedan exponer en el futuro, o el sello en cera del Ayuntamiento de Toledo que “data del siglo XV y que no es como el que conocemos ahora”
Todos ellos, como ha destacado el archivero municipal, Mariano García Ruipérez, son un “ejemplo de ese trabajo y compromiso del Ayuntamiento de Toledo por conservar y poner al servicio de todo el mundo nuestro patrimonio; una tarea en la que se involucran instituciones públicas y talleres privados”.
Otros recursos
El Archivo Municipal también ha publicado dos nuevos ejemplares de Cuadernos de Archivo Secreto que ya están disponibles en la web y en los que según ha destacado Mariano García Ruipérez, “se da un salto de calidad, con más de 100 páginas en cada volumen”.
El número 4, “Los discursos latinos de Ramón Fernández de Loaysa (1832-1843): un intelectual toledano desconocido”, es obra de Alfredo Rodríguez González y Miguel Soto López. Ambos autores recuperan la figura del que fue el primer bibliotecario de la ciudad. Fernández de Loaysa fue presbítero, doctor de la Real Academia de la Historia, intelectual, escritor de la primera mitad del siglo XIX y bibliotecario de la Biblioteca Arzobispal de Toledo, en la época, la de mayor prestigio en la ciudad. Además, fue el encargado de elaborar el discurso inaugural de la Universidad de Toledo.
También ha visto la luz el ejemplar número 5 de Cuaderno de Archivo Secreto; “Pedro Riera Vidal, pedagogo y cantor de la República (1885-1982)”. En este ejemplar, Enrique Sánchez Lubián profundiza en la figura de este intelectual, que tiene cientos de artículos de prensa y que fue autor de una de las guías de Toledo más difundidas. Ambos números pueden consultarse y descargarse de la web del Archivo Municipal. El archivero, Mariano García Ruipérez, ha anunciado que el próximo año se publicará el siguiente número de la revista Archivo Secreto dedicado a Toledo en la fotografía.
240 postales de Luciano Roisin
Esta mañana también se ha presentado un nuevo recurso en el apartado “Toledo en las fotos de…” de la web del Archivo. Son 240 fotografías impresas por el editor y fotógrafo francés Luciano Roisin, datadas en su totalidad entre 1910 y 1936, y en su mayoría, postales de la ciudad, que se han podido recuperar transcurridos los 80 años de la muerte de su autor.
