El vaso de la piscina principal de estas instalaciones sufría unas gravosas pérdidas de agua, con el consecuente perjuicio que esto supone para el Medio Ambiente además de encontrarse en un lamentable estado para el uso y disfrute de los vecinos. Por ello, el Ayuntamiento de Toledo, observadas las deficiencias, decidió actuar con celeridad para que esta instalación pudiera ser utilizada en los actuales meses de verano.
El Ayuntamiento de Toledo se ha mostrado serio en la gestión de esta infraestructura pública dado que ha sido, durante décadas, una reclamación vecinal reiterada.
De esta manera, el Gobierno Municipal, tras observar el estado de avanzado deterioro de las obras, decidió actuar porque “más vale perder dos semanas de baño que una piscina para Toledo”.
Por ello, el Ayuntamiento de Toledo considera que ha merecido la pena la espera porque ahora se disfruta de una instalación totalmente remodelada y acondicionada con gran calidad para los toledanos.
Los cambios producidos en la piscina del Campo Escolar, una de las más antiguas de la ciudad, han consistido en un acondicionamiento general de los vestuarios, su adaptación a criterios de accesibilidad para minusválidos y la creación de uno específico con rampa.
En cuanto al vaso actual se han realizado diversas actuaciones para conseguir más homogeneidad en la impermeabilización; se ha construido un muro de separación entre la piscina de adultos y la infantil; se han ajustado los accesorios de la piscina a la normativa vigente y se ha remodelado el pavimento actual sustituyéndolo por baldosas antideslizantes.
En cuanto a la depuración de las aguas, se han instalado tuberías que componen los colectores de aspiración e impulsión y se han instalado nuevas bombas con filtro.
El muro perimetral también ha experimentado cambios en la parte norte del Campo Escolar.
La remodelación de estas instalaciones de verano ha sido integral y ha tenido una cuantía de 162.000 euros.