El alcalde cree que todo lo que se está haciendo en la lucha contra el empleo “va en la dirección correcta” y finalmente tendrá sus frutos - Ayuntamiento de Toledo

El regidor toledano respondió así a las preguntas de los periodistas sobre los últimos datos de la evolución del empleo en la ciudad durante su visita al barrio de Santa María de Benquerencia, donde presentó el proyecto de iluminación de la Plaza del Poeta Miguel Hernández, una de las primeras obras del Fondo Estatal de Inversión Local en la ciudad.

“La tentación más fácil es decir que el empleo no va con nosotros, que este es un problema de Obama o  de la cumbre del G-20 y e es importante lo que pase en el G-20,  pero también lo que es importante ahora es que nadie mire hacia el otro lado”, aseguró García-Page.

En  este sentido, recordó que aunque las competencias en el empleo no están en los ayuntamientos, “todos podemos ayudar movilizando obra pública, movilizando proyectos, cambiando  la inercia y el paso en la gestión municipal, facilitando trámites para ayudar a abrir negocios e incluso desarrollando suelo industrial”.

“Yo puedo decir con cierto optimismo que aunque estamos viviendo momentos malos y  que todos estamos preocupados, sabemos que todo lo que estamos haciendo terminará teniendo fruto, que todo lo que estamos poniendo en marcha terminará notándose en el empleo”, aseveró.

El alcalde aseguró que no va a pedir paciencia a la gente “porque el más impaciente soy yo” y reconoció que seguramente todo lo que se esté haciendo para luchar contra el empleo puede ser insuficiente por la actual situación económica, financiera y laboral, pero dijo estar seguro de que “las cosas que se están haciendo van en la dirección correcta y a lo largo de 2009 veremos como el problema empieza a cambiar de color”.

“Creo que es un poco responsabilidad de todos, aunque si tuviéramos que  encontrar algún culpable, me acuerdo de esos grandes directivos que han ido a pedir ayuda al estado, pero han ido  en aviones privados e incluso se quieren ir de las empresas cobrando cientos y cientos de millones, que son una obscenidad absoluta”, concluyó.