El alcalde asegura que Toledo ha cerrado “un año complicado pero fructífero” con más servicios y mantenido empleo público - Ayuntamiento de Toledo

Emiliano García-Page ha explicado que la experiencia de “cuatro años gestionando la crisis” ha permitido al actual equipo de Gobierno aplicar criterios de rigor, estabilidad y austeridad en lo económico “hasta el último detalle”, lo que redunda una eficaz gestión de las cuentas municipales a pesar de las evidentes dificultades que están atravesando todas las administraciones.

“La ciudad  -ha dicho el alcalde- funciona con un presupuesto de 84 millones de euros, lo que supone un 20 por ciento menos de lo que teníamos al inicio de la anterior legislatura; pero eso no nos ha impedido que hayamos crecido en prestaciones para los ciudadanos, empleo y servicios básicos”.

Mientras que en otras ciudades las servicios y los contratos públicos se están reduciendo un 20% de media, en Toledo “hemos conseguido que este año se mantenga el mismo nivel en el trabajo de las principales concesionarias”, lo que se ha logrado “sobre la base de no gastar más y no aumentar la presión fiscal”, ha dicho el alcalde.

Determinación y firmeza

García-Page ha recalcado que su equipo de Gobierno mantiene “con determinación y firmeza” el compromiso sostenido durante este año de no reducir la plantilla pública porque “por cada personas que vaya al paro estamos haciendo más profundo el hoyo de la depresión”.

En contra de lo que han hecho otras administraciones, en el Ayuntamiento de Toledo “siempre hemos estado preparados para gestionar lo pírrico” con unos criterios de rigor que se han mantenido “tanto cuando había vacas gordas como en vacas falcas”, lo que ha permitido cumplir el compromiso de sostener los servicios sociales esenciales porque “no podemos abandonar a las verdaderas víctimas de la crisis”.

En este contexto ha lamentado que desde la toma de posesión de María Dolores de Cospedal como presidenta de Castilla-La Mancha, la Junta no ha abonado “nada o casi nada” de los compromisos de pago que mantiene con el Ayuntamiento, que ha tenido que adelantar inversiones, subvenciones, ayudas etc. que dependen de la Administración regional.

El alcalde considera que las claves de este año 2012 se encuentran en la necesidad de “mantener la autoestima” y que “no nos apuntamos al victimismo ni al dramatismo de que todo va rematadamente mal”. Por el contrario, siendo la situación difícil, “nos hemos empeñado en que todos los meses al menos haya una noticia positiva, huyendo de las paralizaciones que predican otras instituciones”.

De esta forma, “la ciudad va a estar preparada para correr cuando el viento vuelva a soplar a favor y podamos así avanzar” en el camino de la recuperación y del bienestar.