Tras los procesos de presentación de solicitudes y selección, hoy han comenzado a trabajar en diferentes servicios municipales, gracias al Programa Extraordinario de Empleo que ha puesto en marcha el Ayuntamiento, 93 personas que hasta ahora se encontraban en situación de desempleo y que no percibían ningún tipo de subsidio ni prestación.
El concejal de Empleo, Antonio Guijarro, acompañado del portavoz del equipo de Gobierno, Rafael Perezagua, ha informado hoy del inicio del trabajo de estas 93 personas, que conforman la primera fase del plan de empleo municipal puesto en marcha para dar cobertura a las personas que en peor situación están afrontando la actual coyuntura económica.
Guijarro ha explicado que este Programa dará trabajo hasta final de año a un total de 155 desempleados, en periodos de tres meses y cobrando el salario mínimo interprofesional. La iniciativa está dirigida a personas que están inscritas como demandantes de empleo y que ya han agotado las prestaciones y no reciben ningún tipo de subsidio.
Los 93 desempleados que han comenzado hoy su actividad realizarán diferentes labores en los servicios municipales que, de esta forma, se verán reforzados durante un periodo de tres meses. Atención e información turística, mantenimiento de instalaciones deportivas y conservación del entorno urbano, patrimonial y medioambiental son las principales áreas donde realizarán su labor.
Doble objetivo
De esta forma, el Gobierno local persigue el doble objetivo de mejorar los servicios municipales “y ofrecer una oportunidad de trabajo a muchos ciudadanos que pueden encontrase en una situación de riesgo de exclusión social al haber agotado sus prestaciones”, ha señalado Guijarro, quien ha remarcado que esta iniciativa la lleva a cabo el Ayuntamiento con recursos propios (505.000 euros).
En este sentido, ha lamentado la escasa ayuda que reciben los ayuntamientos por parte de la Junta de Comunidades, que es la administración competente en la materia, pero que “ha desmantelado todas políticas activas de empleo” suprimiendo las escuelas taller, las casas de oficio y los planes de empleo y reduciendo a dos los talleres de empleo concedidos a Toledo, de los quince proyectos que presentó el Ayuntamiento.
